Imagen de la WEB
La
tarde se viste de crepúsculos
Flores
naranjas con ocasos grises
Mi
alma tirita de sensaciones
Y
mi corazón palpita
Con
el último canto de los pájaros
La
noche va cubriéndome
Con
velos mis cabellos
La
luna adorna mi palidez
Mientras
a lo lejos
Un
perro aúlla una plegaria
Ruido
de la noche, oscuridad de silencios
Movimiento
de sombras y de cuerpos
Danzas
de brujos y de Orishas
Clamando
porque regreses
Trayendo
sobre si, la luz de los cocuyos
Quiero
escuchar de nuevo tus pasos
Tan
cercanos, como tus abrazos
Quiero
recibir tu llamada en un eco
Que
repita mil veces ni nombre
Convirtiendo la noche en un sortilegio de besos
No hay comentarios:
Publicar un comentario